Un finde turístico, con la nueva remesa de visitas, protagonizada por Mar, Marta y Manu, los M&M.

Aparte de un nuevo jueves aciago en el que el blog de nuevo decidió no dar tregua y petarme el posteo y acabar a las dos de la mañana en una carretera deiserta (Tal y como recomiendan las normas de la Embajada Francesa), el viernes no trajo mucho más, salvo ir a alquilar un coche para recoger a la vista a las CUATRO de la mañana en el aeropuerto, levantandonos el sábado a las 8 para ir a Mar Muerto (Tío, está muerto, no se va a ir aunque no madrugues)

Total, que fuimos y las fotos os las enseñaré otro día, porque los perros de la ley me calzaron una multa por exceso de velocidad, a mí, que vengo del p***o país de los puntos, que no me han multado en la vida y no he tenido más que un roce con una columna (La del anuncio).

Iba a 102 km/h en un tramo que rondaba los 70-80 km/h, recto con dos carriles, estilo autopista... En fin yo creo q levantaron el dedo, y según la corriente generada por el coche decidieron pararme... 30 Euracos!!! Simplemente, para ayudar a la composición adecuada de la situación, indicar que detrás mio pararon un bus y un camión.

Y nada, allí estaba aquel c****n con su pose chulesca en mitad de la carretera haciendome gestitos para que me echase al arcén... Hasta ahora nos han parado en muchos controles militares y en uno de policia, pero era el primero en el que el notas, después de ver la matrícula de extranjeros, y nuestro pasaporte de gente que no se integra y aprende el idioma, no nos dejaba marchar

Sinceramente, porque tenía miedo de comenzar una persecución con una mierda de peugeot viendo el vehículo que tenían para perseguir infractores con un policía listo y al ralentí, porque sieno hubiese seguido recto haciendoles el gesto de la victoria con un solo dedo.

Así que me detuve en el arcen, salí y amablemente me indicaron que iba por encima del límite, a 102 km/h. Supongo que el hecho de no mostrarme algo que lo demostrase significaban que había surgido una relación de confianza: Tú te cree lo que yo te digo y yo me creo que vas a pagar sin rechistar. Cuando me dijeron el importe, y tras recordar el "Expreso de Media Noche" , pagué religiosamente y me piré, no sin antes sonreirme por haberle colado el orden de apellidos mal y el número de carnet incorrecto: Muerde el polvo, madero!! (Cierto es que tampoco yo sé lo que me ha puesto en la multa)

Mientras escribo esto, a Pinochet le ha dado un infarto... a ver si le da otro!!