
Da Wall!!!
Vamos, que es lo que diría Ali G al ver el cacho de muro que se gastaban en Belén para separarse de los palestinos.
Yo creo que se puede ver la cantidad de pintadas que había en la pared.. solo faltaba poner tonto el que lo lea.. que igual lo ponía, vamos...
Pues eso, mientras se va acabando la mañana en la oficina y me preparo para tarde de plancha ya que hoy tenemos recepción en casa del embajador (Qué bien suena, eh? Pues con canapeces suena mejor!!) y hay que ir más o menos arregladitos, pues os cuento la última parte del viaje a Israel, de la cual hay otra versión en el blog de Lucía.
Bueno, llegamosa tel Aviv y nos fuimos a casa de Borja(Teneis que verla: Junto a la playa, práctica y una fuente inagotable de mosquitos)
Nos llevó junto a su compi de piso, Beni "Pocholo" Pla a una discoteca de esas en las que solo faltaba la música del hombre y la tierra, acompañado de sonidos de fundición como sirenas, alarmas... Je, no sabías si eran señoras mayores o señores..
Y bueno, pues lo mejor de Tel Aviv fue Borja y el sitio japonés donde cenamos, que tenían unos platos terribles.
Y bueno, aquí llega el cogollo y un sentimiento antisemita que me tardará tiempo en desaparecer.
Os imaginais lo que pasaría en España si se cerrasen los servicios públicos por ser fiesta?
Pues tachín!!! Israel, a cuenta del Sabbath, cierra sus infraestructuras:
Al ir a coger el buseto de Tel Aviv a Jerusalem, cual sería nuestra sorpresa al ver que la estación de autobuses estaba cerrada por ser Sabbath, con lo cual tuvimos q pillar un shuttle, q al final fue un pokito más caro pero más cómodo (Nunca olvidaré la cara del viejo avinagrado q conducía.. yo creo q olía a peo y pensaba q habíamos sido nosotros)
pero el despelote llegó en Jerusalém, cuando al llegar a la estación de transportes palestinos hasta la frontera (o checkpoint, q es como les gusta llamarlo) nos dicen que por ser Sabbath "LA FRONTERA ESTÁ CERRADA"!!!!! y que volviesemos al día siguiente (Día de curro, por supuesto)
A mí lo primero que me entró fue la risa, que se acrecentó cuando nos dijeron que la única frontera abierta estaba al norte del país (A 200 km) y que el taxi allí costaría 100$.
Decidimos entonces ir a una estación de taxis y subastar el viaje, que salió por 75$.. eso sí, el taxista con cara de ultrajado y robado...
A mi todo esto hasta cierto punto me daba igual xq lo único que quería era salir del país.
Lo que me tocó la oreja era que si los hijoputas habían cerrado la fronter por ser Sabbath, los controles de soldados los seguían manteniendo!!
Y luego encima, al llegar a la frontera, pagar y hacer la cola por todo: por salir del país (Pagar por salir de los sitios... que te cobren por entrar, vale, pero esto...), por coger un minibús para cruzar la frontera (Anda que no podíamos cruzarla andando ni nada, los señoritos), para enseñar el pasaporte.
Al final salimos pero el recuerdo de la hospitalidad israelí la podría definir con el gesto de la victoria con un solo dedo.
PD: La censura me ha obligado a reirar una foto en casa de Borja...